Escritor: Nicolás Puente
Es muy extraño ver como pasa el tiempo tan rápido y cómo
vamos cambiando nosotros mismos a lo largo de los años. Yo, por ejemplo, antes
llegaban las navidades y me ponía a saltar, a gritar y a perrear por todo el
salón. Hasta mi familia se reía. ¿Ahora? Ahora solo me da la energía para
pensar en tumbarme en el sofá y ver una peli de esas románticas que ponen en
antena tres, y que cuando se van a anuncios de veinte minutos, te quieres cagar
en todo.
Pero no importa. El tiempo pasa para todo el mundo. Todo
estamos más viejos y pellejos y cada día nos parecemos más a nuestros abuelos.
Aunque fijo que nuestros abuelos tenían más energía que nosotros a esta misma
edad. Todo tiempo anterior siempre fue mejor. Mejor no pensemos en eso. Corramos
un tupido velo.
Volvemos con nuestras maravillosas entrevistas. Esta vez
de la mano de un escritor viajero: Nicolás Puente.
Recordad que podéis compartir y comentar las entrevistas
en vuestras redes sociales o en el mismo blog Bookeando con Desirée. ¡Gracias
por leerme!
Nombre completo: Nicolás Puente
Fecha de nacimiento: Desconocida
Lugar de nacimiento: Dehesas, León (España)
– Buenos días, Nicolás.
¿Cómo te encuentras en esta preciosa mañana de diciembre, ya casi en época de
navidades?
Diría que en el día a día y en lo personal vivo un momento de paz y
tranquilidad. En cuanto a lo literario, me encuentro inmerso en la escritura de
una nueva novela. Me está exigiendo muchísimo trabajo y avanzo muy lentamente.
Estoy en una fase creativa importante, aunque los resultados no son nada
espectaculares. Tengo otras dos en proceso a la espera de que me centre en
ellas y un libro de cuentos casi terminado. Quizá salga en el primer trimestre
del próximo año si me da tiempo a corregirlos.
– Ya vemos que has estado bastante
ocupado. Cuéntanos un poquito más sobre ti.
Desde mi niñez,
mi vida ha estado marcada por los estudios en la escuela del pueblo, luego en
La Bañeza, más tarde en Astorga y, por último, en Madrid, donde me licencié en
teología.
Durante
cinco años me dediqué a la enseñanza y comencé los estudios de filosofía para
después venirme a Alemania a hacer el doctorado, —nunca terminado—, en
filosofía. La vida me ligó a la ciudad de Mainz, donde estudié filosofía y
donde trabajo, en un departamento de informática, desde hace bastantes años.
–
Una vida bastante movidita, por lo que vemos. Muchos
viajes. Se nota que eres escritor de mundo. Seguro que tienes un montón de
aventuras que contar. Ya nos contarás alguna. ¿Cuáles fueron tus proyectos presentes,
pasados y futuros
Hasta el
momento he publicado cinco libros: Uno de historias con fondo navideño: Cuentos de navidad,
con Paqui Valenzuela y publicado por Peripecias Libros; un cuento ilustrado, La estrella de mis
sueños, también con Paqui Valenzuela y publicado por Célebre
Editorial; y en solitario; De amor, desamor y otros demonios, un libro
de poemas publicado por Peripecias Libros; un libro de relatos Cuentos encontrados por
el camino, publicado en Amazon; y hace poco publiqué un nuevo
poemario: Poemas
al borde del camino.
–
Guau. Eso es mucho trabajo. ¿Qué es lo que te decidió por
la escritura?
Comencé a
leer desde muy niño. Luego en la escuela comencé a escribir. Primero para
resolver los ejercicios de literatura y luego para contar las cosas que se me
venían a la cabeza: relatos o poesía. Con el paso del tiempo esa afición
primera se convirtió en necesidad. Muchos de mis escritos han ido directamente
a la papelera, otros están por cajones. Realmente muy pocos se han condensado
en libros.
Escribo
por necesidad. Hay un motivo personal: el deseo de poner orden en mi caos de
ideas, de ocurrencias, de vivencias, para transformarlo en orden, en un cuento
o en un poema. Y, un motivo humano, lograr arrancar algún tipo de emoción en
los posibles lectores.
–
Un buen motivo para escribir. Los que escribimos tenemos
la necesidad de escribir todo aquello que pasa por nuestras cabecitas. Es como
dejar salir nuestros miedos, alegrías y aventuras en forma de palabras. Y tenemos
la necesidad de transmitirles todo eso a nuestros lectores, junto con todas las
experiencias que hemos vivido y vivimos a lo largo de nuestra vida. ¿Qué es lo
que te inspira para escribir?
La
realidad. La realidad está llena de historias si sabes mirarla y hacerle
preguntas. Te sientas en una terraza y ves en la mesa contigua una señora, te
fijas, está triste y comienzas a preguntarte: ¿Por qué esa tristeza? ¿Se acaba
de divorciar? ¿Qué la llevó al divorcio?... Cuando quieres darte cuenta, tienes
una historia surgida del azar de una persona que sencillamente estaba allí. La
realidad de su tristeza no interesa, interesa toda la historia relacionada con
ese sentimiento.
Un
artículo de periódico, una escena de una película, una noticia del telediario…
Todo puede convertirse en relato si preguntas.
–
Yo diría más bien: si haces las preguntas correctas en el
momento preciso. Pero sí, tienes toda la razón. Se puede aprender mucho de todo
lo que nos rodea simplemente con pararnos a mirarlo. A mí me gustaría ser esa
señora y enterarme de que he sido la inspiración para escribir una novela. A
partir de ahora creo que saldré a escribir fuera de casa, a ver si soy la
inspiración de alguien por ahí. Solo espero que no me definan como: triste. ¿Qué
momento del día prefieres para escribir?
Escribo
por la noche, sobre todo, cuando la casa queda en silencio y puedo concentrarme
mejor. Pero apuntes los tomo en cualquier hora del día.
–
Escribir cuando todo lo que te rodea está en completo silencio
es lo mejor del mundo mundial. En mi caso, esa tranquilidad la tuve hace unos
días cuando me pude ir de vacaciones. Fue una vuelta a la tranquilidad
increíble. Echaba de menos el estar sola con mi mente y ajustar mis ideas. Y
recomiendo a todo aquel que escriba que se vaya solo a donde sea de vez en
cuando, que no escriba siempre en casa. Que es fuera donde están todas esas aventuras
y donde cualquier imagen o persona puede ser la inspiración que necesitamos en
ese mismo momento. ¿Te consideras más un escritor de brújula o de mapa?
Soy una
mezcla. Me gusta tener claro el camino y muchos de sus pasos. Luego según voy
escribiendo, añado pasos, quito, cambio, etcétera... Lo planeado en un
principio, en mi caso no es algo fijo y seguro al que me agarro. Al contrario,
sobre la marcha voy cambiando de acuerdo a la necesidad de la historia.
–
Y haces muy bien. Todo lo que escribimos debe pasar un
proceso de pulimiento tras terminar de escribirlo. ¿Cómo fueron tus principios
en la escritura y tus primeras publicaciones?
Hasta el
2016 no publiqué nada. Si algo vio la luz fueron escritos premiados en algún
concurso, aunque he de decir, que pocas veces me decidí a participar. Luego en
ese año publiqué un libro de relatos Cuentos de Navidad con Peripecias Libros.
Poco después publiqué, De amor, desamor y otros demonios, un libro
de poemas escrito entre el 2015 y 2016. Todos los poemas son de esa época, a
excepción de cuatro o cinco escritos antes. Quizá algún día revise los poemas
anteriores e intente hacer algo con ellos.
–
Yo los juntaría todos en un mismo volumen. Sería genial
tener todos los proyectos antiguos que has escrito hace años en un mismo libro.
¿Utilizas o has utilizado seudónimo alguna vez?
Escribo
con mi nombre: Nicolás Puente. No uso seudónimo.
–
Bien. Sencillo. Y, dinos, ¿qué género sueles escribir?
Escribo
poesía, relato y novela. Los relatos me permiten condensar historias que no
necesitan muchas páginas para poder entenderse. Las novelas todo lo contrario,
necesitan de una extensión mayor para poder ver todos los lados posibles del
problema, para poder llegar al núcleo central de la historia.
La poesía
exige mucho más de mi interioridad, de mi comprensión de la vida y del mundo.
La poesía me desnuda mucho más, me expone mucho más. Y a pesar de todo, la
percibo como una necesidad vital.
–
Creo que muchas veces ese es el problema por el que
muchos escritores no se atreven a publicar sus novelas. El nivel de desnudez mental
frente al público, el ponerse en el punto de mira del lector, de las críticas…
Es bastante complicado y hay que saber llevarlo muy bien. No todo el mundo es
capaz de sobrellevar eso. Pero, como dicen por ahí: si no arriesgas, no ganas. ¿Qué
estrategia usas para promocionarte?
Soy un
malísimo vendedor. De cuando en cuando hago referencia a mis libros, pongo un
poema, una imagen con un poema, ecétera... Pero no tengo una estrategia
consciente.
–
Ese es el talón de Aquiles de muchos de nosotros, entre
los que me incluyo. Pero si nosotros mismos no nos promocionamos, nadie nos va a
hacer el trabajo. Hay que ponerse manos a la obra si queremos que se nos
conozca más. ¿Prefieres auto-publicar o publicar con editorial?
Tal y
como están hoy las editoriales me he decidido por auto-publicar. Tengo la
experiencia de haber estado en una editorial, pero no resultó muy positiva. Las
editoriales pequeñas cuentan con poco dinero para promocionar a los autores y,
en su gran mayoría, no lo hacen. Si la promoción queda en manos del autor,
entonces, con los medios de hoy, ¿por qué no realizar todo el proceso? En las
redes se ofrecen cientos de correctores, maquetadores, portadistas... Solo
debes elegir el profesional correcto. El resto es enviar a una imprenta, Amazon
u otras muchas empresas donde se pueden poner los libros a la venta.
–
Cuidado con contactar con correctores y demás con poca
experiencia. Debemos elegir muy bien a quién le confiamos nuestra obra. No todo
el mundo tiene la experiencia necesaria ni son todo lo profesionales que
nosotros pensamos. Hay muchos engaños en redes. ¿Realizas alguna vez el proceso
de corrección y demás tú o se lo dejas a un profesional siempre?
Hago
varias correcciones antes de enviarlo a un corrector profesional. Para mí eso
es vital. Luego la maquetación y la portada suelo hacerlas yo. En algunos casos
he recurrido a profesionales. Para la corrección cuento siempre con un
profesional.
–
Haces bien. A nosotros, por mucho que queramos corregirlo
una y otra vez, siempre se nos escapan
cosillas. ¿Alguna manía como escritor?
No tengo
ninguna manía especial. Algunas veces pongo música suave, pero la mayoría de
las veces escribo en silencio. Lo que sí necesito son libros y diccionarios a
mi alrededor, ya sean en papel o en internet.
–
Yo, en ese caso, soy totalmente al contrario. Una música
clásica suave que me acompañe siempre me ayuda a centrarme. De esas que duran
unas doce horas, así no tengo que andar pendiente. ¿Qué personaje serías si pudieras
elegir uno?
Supongo
que me gustaría ser un poco como el Quijote: perseguir los sueños de un mundo
mejor, más justo, más idealista.
–
Bueno, no creo que te refieras a la locura que al final se
hizo con él. Yo solo me he leído el Quijote una vez, pero no me lo esperaba
así, la verdad. Una pregunta con trampa: ¿E-Book o papel?
Personalmente,
me gusta más el papel. Me gusta la sensación de tocar, de sentir las páginas
entre los dedos. Pero entiendo que las nuevas generaciones se relacionen mejor
con la pantalla y el libro electrónico.
–
No todos. A mí no me ha hecho nunca mucha gracia el hecho
de leer en digital. NI con el E-Book ni con el teléfono, como he visto que
hacen muchos. Y me considero joven, ¿eh? Aún. Por el momento. ¿Escritores
favoritos?
Te diría:
Vargas Llosa, Baroja, Borges, García Márquez, Buero Vallejo, Delibes, Gamoneda,
Marsé, Mendoza, José Hierro...
–
¡Madre mía! Todos los grandes, vamos. ¿Libros favoritos?
Cien años
de soledad, Crimen y castigo, La ciudad y los perros, Últimas tardes con Teresa...
–
Las dos primeras son muy conocidas. No me las leí, pero
oí hablar mucho de ellas. ¿Cuánto tiempo dedicas a escribir, leer y
documentarte?
No dedico
el mismo tiempo cada día e incluso hay días que no escribo nada. Solo leo. Pero
todos los días, sin excepción, leo.
Normalmente,
antes de comenzar a escribir algo, comienzo también a documentarme: estudio la
época, la zona, su historia y luego mientras escribo intento leer sobre las
cosas concretas para conocer mejor los detalles. ¿Cómo vestía la gente? ¿Quién
gobernaba? ¿Cómo se divertían? ...
–
Eso está muy bien. Depende de lo que escribas necesitarás
más documentación o menos. ¿Qué tiene que tener tu libro ideal para que te
decidas a leerlo?
Para mí
el libro ideal debe provocar algún tipo de emoción: rabia, alegría,
nostalgia... Eso mismo intento en mis escritos.
–
Si un libro no transmite todos esos sentimientos, malo. En
cada libro hay sentimientos que debe despertar en el lector, y me atrevería a
decir que debería transmitir todos en algún momento de la novela. ¿Algún
consejo para futuros escritores?
Aconsejo
la lectura como condición indispensable. Sin leer es imposible aprender a
escribir bien y desarrollar las técnicas narrativas.
Totalmente
de acuerdo. Todo aquel que se considera escritor antes tiene que haber sido o
ser un lector ávido. Tiene que haber leído muchísimo. Es la mejor forma de
aprender a escribir.
Muchas
gracias por tu participación en la entrevista. Esperamos que te vaya todo bien
y que más adelante vuelvas para contarnos tus éxitos con las novelas.
Aquí os dejo
las redes sociales de Nicolás:
Y vosotros no os vayáis. Ya sabéis que
lo bueno viene los martes y los viernes con nuevas e interesantes entrevistas.
Hasta entonces, ¡feliz lectura y
escritura!
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