Criaturas mitológicas: El Leviatán
¡Buenos y
estupendísimos días, Bookie!
¿Te acuerdas cuando vivías con tu madre y ésta no paraba de recoger aquí y allí
sin parar de un lado para otro?
Yo creo que hacía
efecto Leviatán en la casa. Literalmente, cogía cosas al vuelo y al segundo se
encontraban en otro lugar. Especialmente cuando se cansaba de repetir las cosas
y al recogerlas las tiraba a la basura.
Lamentablemente,
ahora nos toca a nosotros pasar como un torbellino por toda la casa recogiendo
a toda prisa para no llegar tarde al trabajo. Sobre todo, si contamos con niños
pequeños en la casa. Eso sí que es pasar como un torbellino, ¿eh?
Si no sabes a qué
me refiero con el efecto Leviatán, aquí lo vas a saber.
¡Lee y verás!
LEVIATÁN
Es una bestia
marina gigante narrada en la biblia que se describe con aspecto físico de dragón.
En los cultos
satánicos se considera uno de los demonios principales que conforma la trinidad
demoníaca junto a Lucifer y Belial.
En la representación
cristiana se le considera asociado a Satán o el Diablo; también lo consideran
un símbolo de la humanidad en oposición a Dios.
Algunos eruditos
bíblicos consideran que el Leviatán representa las fuerzas del caos.
En la demonología
medieval es un demonio acuático que intenta poseer a las personas, siendo éstas
difíciles de exorcizar.
Durante la edad
de oro de los viajes marinos, los marineros europeos vieron al Leviatán como
una gigantesca ballena-monstruo del mar, o una serpiente marina que devoraba naves
enteras al nadar alrededor de los cascos rápidamente creando un torbellino.
El efecto
Leviatán es la capacidad de tu madre de recoger cosas y hacerlas desaparecer
del lugar. Ya sea porque las recogió y las puso en otro lugar o bien porque te las
ha tirado a la basura. Siendo ésta última, el peor efecto Leviatán. Suerte con
eso. Ya me contarás que tal te sale a ti el efecto Leviatán cuando tengas
hijos. O si ya los tienes, cuéntame, cuéntame.
¡Te espero!
Nos vemos a la
vuelta de la hoja.
Hasta entonces,
¡feliz lectura y escritura!
Fuente: Wikipedia
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